Esa mañana nos despedimos de Mike tras disfrutar de su último desayuno, recogimos la tienda de campaña y nos pusimos en ruta, ya que teníamos más de 300km hasta Parque Nacional del Lago Nakuru.

Esto es una muestra del cariño que le ponía Mike a todo lo que nos preparaba
Esto es una muestra del cariño que le ponía Mike a todo lo que nos preparaba

Pasando por el Ecuador en Nanyuki

Por el camino hicimos una parada rápida en Nanyuki, ya que por allí pasa el Ecuador y lo tienen marcado con señales y el típico sistema rudimentario para ver para dónde gira el agua (para lo que no pagamos, por lo que no tenemos fotos...)

Foto de rigor al paso por el Ecuador
Foto de rigor al paso por el Ecuador

Y rompimos el motor del Mitsubishi Pajero

Veinte kilómetros después de Nanyuki tuvimos un contratiempo... nuestro Mitsubishi Pajero se paró y nos apartamos al arcén (por llamarlo de alguna forma) cerca de Nary Moru.

Parecía que estábamos en el medio de la nada, pero en cuanto nos bajamos comenzó a llegar un montón de gente para echar un vistazo y nos ayudaron a mover el coche a una zona más segura. Querían echar un vistazo por el capó pero les comentamos que preferíamos llamar a la empresa de alquiler (Concorde Car Hire) y es lo que hicimos.

Llamaron a un mecánico de Naru Moru que vino en Moto con un maletín y no fue capaz de arreglar nada por lo que nos dijeron que esperáramos, que vendrían con otro Pajero desde Nairobi para tratar de arreglar nuestro vehículo o que pudiéramos continuar con nuestro viaje en el coche en el que ellos vendrían.

Le pagamos al mecánico (luego nos lo devolvieron los de Concorde) y nos armamos de paciencia.

Esperando al mecánico...
Esperando al mecánico...

Estábamos a unos 180km de Nairobi por lo que entre que prepararon el coche y llegaron en unas 3 horas (la verdad que le dieron zapatilla...). El tiempo se nos echaba encima y a las 18:00 cerraba el Parque Nacional del Lago Nakuru, donde teníamos reservado el alojamiento de esa noche, y nos dijeron que no podían arreglar el coche. Al parecer se había roto la correa de la distribución.

Los dos hombres que vinieron en el nuevo Pajero se quedarían allí hasta conseguir arreglar el coche (probablemente haciendo noche en Naru Moru) y nosotros nos iríamos con el nuevo vehículo, que tuvimos que repostar (estaba en la reserva) y arreglar un pinchazo (tenían una rueda muy baja y en efecto, estaba pinchada, menos mal que nos dimos cuenta).

Desde Naru Moru al Parque Nacional del Lago Nakuru

En total perdimos más de 4 horas por lo que tocó ir a buena velocidad para poder llegar a tiempo al Parque Nacional de Lago Nakuru, del que aún nos separaban unos 180km (que pueden ser entre 3 y 4 horas a buen ritmo...).

Fuimos adelantando a todo vehículo que pudimos y conseguimos entrar en el parque a las 17:58, lo que fue una pena porque el trayecto era fabuloso y no tuvimos tiempo de parar en ninguno de los muchos miradores por los que pasamos.

Una vez abonadas las tasas del parque nos dirigimos a las bandas del Wildlife Club of Kenia, y en este corto trayecto dentro del parque vimos cientos de búfalos, cebras, impalas, ... Nakuru parecía lleno de vida salvaje.

Nuestro nuevo Pajero junto a la Banda que alquilamos en el Lago Nakuru
Nuestro nuevo Pajero junto a la Banda que alquilamos en el Lago Nakuru

Esa noche nos pegamos una ducha, nos cocinamos algo de pasta (la banda tenía cocina y baño, un lujo para los 1.250 chelines que pagamos por persona) y nos metimos en la cama, ya que a las 06.00 abrían las puertas del parque y queríamos aprovechar, como siempre, las primeras horas del día.